El clítoris suele ser la parte más mágica del cuerpo de la mujer porque no tiene otra función que la de brindar placer sexual. Aun así, por más mágico que sea, esta zona sigue siendo un misterio para aquellos que se preocupan por cómo encontrarlo o no están 100% seguros de cómo manipularlo.
Descubre algunos consejos para comenzar y algunas técnicas de estimulación del clítoris que dejarán a todos sin aliento
Ya sea que estés pensando en tu propio clítoris o en el de tu pareja (o en ambos), ten la seguridad de que no debería ser difícil ubicarlo y que hay muchas formas de estimular esta zona que se sienten extremadamente bien. Cada vulva es distinta, así como cada clítoris, por lo tanto, para localizarlo es necesario explorar y aprender qué les gusta a ti o a tu pareja.
¿Qué es el clítoris?
Es una parte de la vulva que brinda máximo placer sexual. Se encuentra oculto debajo del capuchón del clítoris, un colgajo de piel que se forma cuando se juntan los labios. Gran parte de las mujeres necesitan cierta estimulación en esta zona para lograr orgasmos.
La parte del clítoris que se puede ver desde el exterior es realmente solo una pequeña porción de toda la totalidad. Se denomina glande clitorídeo y tiene múltiples terminaciones nerviosas que responden al contacto sexual, además, contiene dos columnas que se llenan de sangre y se endurecen cuando una persona se excita.
¿Dónde se encuentra?
Cada vulva tiene un aspecto diferente, pero el clítoris normalmente está en la parte superior de la vulva, donde los labios internos se unen. Está cubierto por una solapa de piel denominada capuchón clitorídeo, que puede ser necesario retirar para poder observar el clítoris.
Por ejemplo, imagina a una mujer acostada boca arriba con las piernas abiertas. Si vez entre sus piernas, mirarás una hendidura que va desde la parte superior de los labios exteriores hasta la entrada de la vagina. Dentro de esta hendidura están los labios internos, estos se unen en la parte superior para formar el capuchón del clítoris y la parte del clítoris que se puede visualizar y sentir que está debajo de ese capuchón. En algunas mujeres, el clítoris sobresale mucho o solo un poco, mientras que en otras está completamente oculto.
Consejos para encontrar el clítoris
El clítoris no debería ser tan complicado de hallar, sin embargo, puede estar escondido debajo de otras partes de la vulva. Aquí te ofrecemos varios consejos para encontrarlo, ya sea el tuyo o el de tu pareja.
¿Cómo encontrar tu propio clítoris?
- Espejito: a algunas mujeres les puede resultar difícil ver bien su propia vulva. Sin embargo, los espejos son de gran ayuda. Siéntate en el borde de la cama o en una silla y mantén un espejo entre las piernas. Con la otra mano, separa los labios de la vulva y busca una pequeña protuberancia ovalada cerca de la parte superior de los labios. Todos los clítoris son distintos, pero para muchas, la parte que se puede visualizar es del tamaño de un guisante.
- Usa las manos: muchas veces puede ser más fácil palpar esta zona que buscarla. Empieza separando los labios externos con los dedos y posteriormente pásalos por los labios internos. El pliegue de piel en la parte superior donde se unen los dos labios internos es el capuchón clitorídeo. Si lo retiras, puedes sentir la parte externa del clítoris.
- Enciéndete primero: cuando te excitas todo se hincha, lo que puede hacer que esta zona sea más fácil de sentir y ver. Considera masturbarte, ver pornografía o usar un vibrador durante unos minutos antes de empezar a explorar.
- No te estreses: el único objetivo del clítoris es dar placer, pero no necesitas ubicarlo en un mapa para disfrutar de la sensación. Recuerda que gran parte de esta protuberancia está bajo la superficie y que algunas personas prefieren el contacto indirecto con el clítoris. Si buscar el clítoris con los dedos te resulta placentero, probablemente te hayas aproximado a él.
¿Cómo encontrarlo en tu pareja?
- Pide indicaciones: antes de empezar una exploración del cuerpo de tu pareja, es recomendable pedirle su consentimiento, al igual que también puedes pedirle indicaciones. Todas las vulvas y clítoris son distintos, así que no tienes que sentir pena de preguntar, pero sí puedes ser un poco sutil al respecto. En vez de decir “Dibújame un mapa de tu cuerpo”, mejor pregunta “¿Dime dónde te gusta que te toquen?”.
- Míralo bien: cuando obtengas el consentimiento de tu pareja, ubícate entre sus piernas y observa. Es posible que tengas que separar los labios y tirar hacia atrás del capuchón clitorídeo para poder mirarlo bien. Este también puede ser un buen momento para proporcionarle sexo oral.
- Usa tu dedo: puede ser más fácil sentir el clítoris que buscarlo y los dedos son la mejor herramienta para ello. Primero, aplica un poco de lubricante en ellos y luego frota hacia arriba y hacia abajo la hendidura de la vulva de tu pareja. Hacia la parte superior deberías sentir una pequeña protuberancia.
- Enciéndela primero: cuando tu pareja se excita, su clítoris se hincha y el capuchón clitorídeo se retirará un poco. Esto hará que sea más fácil ubicar y sentir el clítoris. No empieces a explorar de inmediato, intenta excitarla besándola, acariciando su vulva o ofreciéndole sexo oral primero.
- No te estreses: puede que sea algo desconocido para ti, pero buscar esta zona en tu pareja debería ser divertido para los dos. No te estreses pensando si encontraste el lugar, porque hay muchos lugares que harán que tu pareja se sienta muy bien.
Técnicas de estimulación del clítoris para sorprender a tu pareja (o a ti misma)
Como ya hemos dicho, cada vulva y clítoris es diferente y a cada una le gustan cosas distintas. A algunas mujeres les gusta la estimulación directa de esta zona con los dedos, la lengua o los juguetes sexuales, mientras que a otras les parece demasiado intenso y prefieren que las estimulen cerca del clítoris, pero no en su propia superficie.
Ya sea que se trate de tu propio clítoris o el de tu pareja, la única manera de saber qué es lo que más les gusta es probar diferentes técnicas. Aquí, te detallamos algunas excelentes técnicas para su estimulación:
- Vueltas: coloca 2 o 3 dedos cerca de la parte superior de los labios y empieza a frotar en círculos las veces que desees. Puedes dejar que tus dedos se deslicen sobre la piel (un lubricante ayudará) o empujar hacia abajo con un poco de presión para estimular las estructuras internas del clítoris.
- Golpea: un golpecito constante en el capuchón clitorídeo puede maximizar el placer. O retrae el capuchón y golpea el clítoris. También puedes utilizar los dedos para tocar suavemente el clítoris y provocar destellos repentinos. Prueba con un vibrador de dedos para obtener una sensación extra.
- Sujeta el capuchón: algunas mujeres prefieren el contacto indirecto y una buena manera de hacerlo es jugar con el capuchón del clítoris. Usa los dedos y acaricia esta área en círculos o de arriba hacia abajo. O puedes sujetar este pedazo de piel entre el pulgar y el índice y frotar los dedos. Por momentos, tocarás el clítoris directamente, lo que puede resultar muy placentero.
- Acarícialo: algunas mujeres tienen un clítoris agrandado que se puede asemejar mucho a un pene pequeño. Si tú o tu pareja tienen un clítoris muy grande, es posible que quieras manipularlo como un pene pequeño e intentar frotarlo de arriba a abajo (usando un poco de lubricante).
- Juguetes: hay numerosos juguetes diseñados para la estimulación del clítoris. Los vibradores con varita, que se usan externamente en toda la vulva, pueden estimular el clítoris o también puedes probar uno diseñado para imitar una lengua o un succionador de clítoris que usa aire para inducir placer en esta zona sensible.
Experimentar con el clítoris puede ser parte de los juegos previos, el sexo oral o la masturbación. Gran parte de las mujeres necesitan un poco de estimulación del clítoris para alcanzar un orgasmo.
Orgasmos del clítoris
Algunas mujeres sienten que diferentes tipos de estimulación producen distintos orgasmos. Un orgasmo del clítoris es aquel que se genera a nivel superficial y produce un hormigueo, en cambio, un orgasmo vaginal, se produce por la penetración y puede sentirse en un área más profunda del cuerpo. Muchas personas también pueden alcanzar orgasmos por la estimulación del punto G, el ano y demás zonas erógenas.
Cada persona experimenta los orgasmos de manera distinta y lo que para una es un orgasmo clitoriano, para otra puede ser un orgasmo vaginal. La mayoría necesitan un poco de estimulación en esta zona para tener orgasmos incluso durante la penetración. Los dedos, los juguetes sexuales y los condones texturizados pueden ayudar significativamente a lograrlos.
0 comentarios